Lionel Messi recibió una sanción de dos partidos luego de ser expulsado por primera vez en su carrera con el Barcelona en la final de la Supercopa Española el pasado domingo.

Messi, de 33 años, vió la tarjeta roja en el último minuto de la prórroga tras darle el la cabeza a Asier Villalibre del Athletic de Bilbao. El árbitro Jesús Gil Manzano fue alertado del incidente por el VAR y después de ver una repetición en el monitor de la cancha decidió otorgarle a Messi una tarjeta roja.

El comité de competición de la Real Federación Española de Fútbol se reunió hoy martes y acordaron que las acción merecía una suspensión de dos partidos.

Messi se perderá el viaje del jueves a Cornella en la Copa del Rey y el partido de La Liga del domingo ante Elche. Si el Barça vence a Cornella, volverá para una posible eliminatoria de octavos de final en la Copa del Rey la próxima semana y también estará disponible para el partido de Liga en el Camp Nou contra el Athletic.

Messi solo había sido expulsado anteriormente tres veces en su carrera profesional y solo una vez a nivel de clubes. Su primera tarjeta roja fue en febrero de 2005 en un partido de liga del Barça B ante el Peña Sport. Fue expulsado por sus protestas tras no recibir penalti en los últimos 10 minutos del partido. Más tarde, ese mismo año, en agosto, fue expulsado en su debut con Argentina en un amistoso contra Hungría y volvió a ver la tarjeta roja mientras jugaba para su país contra Chile en la Copa América 2019.

Sin embargo, nunca había sido expulsado mientras jugaba para el Barça hasta el domingo, con su primera tarjeta roja para el club en su 753ª aparición oficial.