La empresa LUMA Energy que administra la distribución eléctrica de la Isla afirmó hoy que no anticipa cambios en su relación de la generadora eléctrica de Guayama AES, al tiempo que elogió la operación de la carbonera privada y declinó especular sobre un nuevo contrato de la entidad con el gobierno.

Mario Hurtado vicepresidente de LUMA dijo al Foro de Puerto Rico que espera qie AES siga cumpliendo su contrato como lo ha hecho hasta el momento, al tiempo que elogió el trabajo de la generadora que produce electricidad quemando carbón.

“AES produce electricidad mediante un método muy económico”, dijo el ejecutivo de LUMA al referirse a la controversia sobre la posibilidad de que la empresa ubicada en Guayama pida un rescate al gobierno.

Mientras tanto el líder comunitario Victor Alvarado dijo en entrevista por separado con El FORO que no le extraña la posición de LUMA y recordó que lo que esta empresa no dice es que AES mantiene apagada desde diciembre la mitad de sus instalaciones de generación en el sur de la Isla.

“Creo que AES debe irse y no nos hará falta porque tienen la mitad de sus unidades fuera y han estado fuera sin que Puerto Rico los necesite”, dijo Alvarado.
El líder ambientalista ha criticado la posibilidad de que el gobierno rescate económicamente a AES, adquiera sus activos y reanude un contrato donde se le permita una operación “contaminante”.

La empresa generadora eléctrica a base de carbón AES, no tiene ante el gobierno ninguna propuesta formal de rescate y si saliera del sistema provocaría un aumento en el coste del kilovatio hora para los consumidores confirmó en tanto hoy la Autoridad de Energía Eléctrica.

Josue Colón director de la AEE formuló el comentario hoy al coincidir con expresiones de la Secretaría de la Gobernación Noelia Gaercía que aseguró al Foro de Puerto Rico que Fortaleza no tiene ante sí ninguna propuesta para encargarse de la operación de la carbonera.

García y Colón se refirieron a versiones de prensa que citan documentos enviados por AES al gobierno para que el estado se encargue de la titularidad de la compañía que está en serias dificultades económicas y renegocie el contrato que expira en tres años.

Colón dijo que espera que la compañía cumpla con su contrato, como lo ha estado haciendo.