Lluvias: Continúa rescate de familias en sectores inundados, nadie muerto ni herido
Nadie resultó muerto ni herido tras las históricas inundaciones del pasado fin de semana en la zona norte de Puerto Rico donde cientos de personas perdieron sus propiedades y se produjeron cientos de miles de dólares en pérdidas confirmaron hoy el alcalde de Cataño y el director del Negociado de Manejo de Emergencias.
El alcalde Julio Alicea, nuevo ejecutivo municipal de la ciudad costera ubicada frente a San Juan, dijo que su personal continúa esta mañana rescatando personas afectadas por inundaciones de cuatro pies de altura en los sectores más vulnerables.
La Cruz Roja Americana dijo que el sector más afectado en la isla es el barrio Juana Matos de Cataño donde las inundaciones aún persiste a pesar de que la cantidad de lluvia ha mermado.
Por su parte el director de manejo estatal de emergencias Nino Correa dijo que un árbol cayó hoy en la carretera 199 de Guaynabo poniendo en riesgo la seguridad de decenas de personas. Pero nadie, dijo Correa, ha muerto ni ha resultado herido durante las lluvias que algunos residentes de la zona afectada han catalogado como peores que las que ocurrieron durante el huracán María. Un automóvil fue arrastrado por las aguas crecidas de un río y un deslizamiento de tierra se reportó en Morovis, pero nadie resultó con daños físicos.
Por su parte la Administración de Servicios Contra la Adicción y de Salud Mental (AMSCCA) envió personal especializado a varios refugios establecidos en los municipios afectados para mitigar el impacto emocional del desastre en residentes de la zona de San Juan.
El Servicio Nacional de Meteorología dijo que el presente mes de febrero ha sido el más lluvioso en la historia de la Isla con acumulaciones pluviales de más de 8 pulgadas de lluvia.
“Esperábamos dos o tres pulgadas de lluvia y ya vamos por ocho. La vaguada nos ha dado fuerte”, dijo Correa al referirse al frente frío que ha generado inundaciones en San Juan, Bayamón, Guaynabo, Toa Baja, Toa Alta y Vega Alta.
Cien familias se vieron impactadas con las inundaciones en Vega Alta, algunas de ellas perdiendo todas sus pertenencias tras las fuertes lluvias.
La alcaldesa María Vega dijo que las lluvias generan deslizamientos en las montañas en la zona norte de la ciudad y han debilitado al menos dos puentes ya deteriorados. Vega dijo que el gobierno estatal usó maquinaria pesada para intentar limpiar el caño Cabo Caribe del Barrio Cerro Gordo, pero no lo lograron.