Publicidad en Puerto Rico
Puerto Rico se posiciona como uno de los mercados publicitarios más robustos de América Latina, con una inversión que ronda los $2,000 millones. Esta cifra, notablemente alta en comparación con otros países de la región como República Dominicana, subraya la importancia de la isla en el panorama publicitario latinoamericano. Sin embargo, el sector enfrenta desafíos significativos debido a la proliferación de nuevas tecnologías y cambios en los patrones de consumo, según Iván Santos, CEO de VML en Puerto Rico.
A pesar del crecimiento en el número de medios durante las últimas dos décadas, la inversión en publicidad se ha mantenido relativamente constante. Las agencias han tenido que innovar para conectar con audiencias a través de plataformas emergentes. Hace una década, el 90% de la inversión en publicidad se destinaba a la televisión. Hoy día, esa inversión se ha diversificado hacia redes sociales como Facebook e Instagram, y medios como la radio, especialmente tras la pandemia de Covid-19, explicó Santos en una entrevista con el medio El Nuevo Día.
Aunque la televisión sigue siendo un medio clave en Puerto Rico, la tendencia global muestra un declive en la publicidad televisiva. Juan Pablo Jurado, CEO de VML en Latinoamérica, señala que el cambio demográfico está influenciando estos patrones. “Hoy en día hay gente joven que cuando se mudan ya no tienen televisión por cable, tienen simplemente wifi,” dijo Jurado.
No obstante, en Puerto Rico, la televisión mantiene su relevancia gracias a la alta proporción de población adulta mayor, un segmento que consume televisión en mayor medida. “El promedio de edad en Puerto Rico supera los 50 años. Este demográfico ayuda a que la televisión se mantenga firme, pero en futuras décadas, su relevancia podría disminuir,” añadió Santos.
A pesar de los retos, la industria publicitaria en Puerto Rico se mantiene fuerte y dinámica. La isla sigue siendo un mercado crucial para la publicidad en América Latina, adaptándose continuamente a los cambios tecnológicos y demográficos.
Fuente: El Nuevo Día