El alcalde de Cayey, Rolando Ortiz Velázquez, presentó el nuevo calendario 2023, que se ha estado distribuyendo en las comunidades y está disponible en la Alcaldía Digital, localizada en la Calle De Diego esquina Manuel Corchado. El mismo está dedicado al pintor, fotógrafo y agrimensor Ramón Frade León, y a la plaza pública que lleva su nombre. “Ya es tradición en Cayey que iniciemos el año con esta publicación que nos sirve a todos para organizar nuestras gestiones laborales y personales. Este año la plaza pública es el tema central, así como los diversos ofrecimientos que tiene la misma”. 

La publicación, que cuenta con el auspicio de varios comercios cayeyanos que aportaron económicamente a la producción, inicia este mes de enero con una reseña al espectacular mural que el artista puertorriqueño David Zayas creó para engalanar la concha acústica de la plaza pública. “La idea desarrollada por David está basada en nuestra estrategia municipal de aportar a la educación pública. Hacer de la cocha acústica una sala de clases es la idea, para sembrar en las. Nuevas generaciones la sensibilidad hacia las artes”, señala Ortiz Velázquez, quien invitó a descubrir los secretos que guardan las imágenes plasmadas en la estructura.

El genio artístico de Frade llegó incluso a ser parte de las paredes de la Iglesia Nuestra Señora de la Merced, donde en el altar hay una pintura de La Merced rodeada de ángeles, datada en 1945. “Esta fue en pago de una promesa de Doña Reparada, la esposa de Frade. De igual manera, hay una pintura aún más antigua, del 1925 en honor a Nuestra Señora del Perpetuo Socorro”, añade el Alcalde. La plaza Cayetana cuenta también con una zona de kioskos de gastronomía, con mesas y sombrillas al aire libre para el disfrute general. 

Una de las obras más reconocidas de Frade, “El Pan Nuestro”, donde el jíbaro va bajando la jalda con un racimo de plátanos, es obra fechada en 1905 y que está representada con una escultura a tamaño natural, que recrea a Frade pintando la obra. Cuando se reconstruyó la plaza, se descubrió en el subsuelo el primer cementerio de la ciudad, lo que causó gran sorpresa por la gran cantidad de osamentas halladas, más de 500. Se aplicaron todos los reglamentos y leyes de protección de hallazgos arqueológicos, bajo la supervisión de la arqueóloga Virginia Rivera Calderón y actualmente se recreó el cementerio tal y como se encontró, a los fines de honrar la memoria de los fundadores de la ciudad y promover la educación a cayeyanos y visitantes.

En cada uno de los meses del calendario, se destacan detalles especiales de la plaza, como los árboles nativos, el homenaje a Don Jesús Cruz,”el piragüero alegre”, el carrusel y recuerdos de la inauguración de la estructura el primer fin de semana de septiembre del año pasado con los campeones Toritos de la pelota Doble A. “Fueron seis años de trabajo de ingeniería, de investigación y de terminaciones, pero gracias a Dios le estamos dando a Cayey y a Puerto Rico una plaza de primer orden, que es a la vez un gran salón de clases. Les invitamos a disfrutarla”, finalizó Ortiz Velázquez.