Chick-fil-A sigue adelante con su plan de expansión en Puerto Rico y este jueves, 27 de junio, inaugura su sexto restaurante en la isla, el segundo en la Ciudad Señorial de Ponce. El nuevo local estará ubicado en la carretera PR-14, kilómetro 3.7, en el sector La Rambla de Ponce. Este establecimiento generará aproximadamente 120 empleos a tiempo completo y parcial, contribuyendo a la economía local y proporcionando nuevas oportunidades para los residentes.

Enrique Questell-Pereira, oriundo de Ponce, ha sido seleccionado como el propietario-operador franquiciado independiente para esta ubicación. Con esta nueva adición, el número de restaurantes Chick-fil-A en Puerto Rico aumentará a seis, uniéndose a las ubicaciones existentes en Los Filtros, Plaza del Sol, Humacao, Hatillo y Reina del Sur.

La compañía planea continuar su crecimiento en Puerto Rico con la ambición de abrir de 15 a 20 restaurantes adicionales para 2030. Según Chick-fil-A, su modelo de franquicia está diseñado para asegurar que la mayoría de los restaurantes sean propiedad y estén operados por individuos activos y no por inversionistas pasivos.

Questell-Pereira supervisará todas las operaciones diarias de la ubicación en La Rambla. Sus responsabilidades incluyen la gestión de la fuerza laboral de 120 empleados. Posee títulos de la Universidad de Puerto Rico, Mayagüez, y de Cornell University. Antes de su rol actual, Questell-Pereira trabajó con Red Ventures, donde desempeñó un papel fundamental en la donación de 40 hogares a familias afectadas por el huracán María, y se desempeñó como director de la Oficina de Recuperación del Departamento de Educación de Puerto Rico. Su esposa Glorimar será la directora de Mercadeo del restaurante.

“Me siento honrado de tener la oportunidad de abrir el segundo restaurante Chick-fil-A en la zona sur y hacer de mi restaurante un lugar de cuidado y crecimiento para la comunidad de Ponce, los ‘team members’ y vecinos,” expresó Questell-Pereira en declaraciones escritas. “Tengo pasión por desarrollar el talento y ayudarles a crecer a su máximo potencial y espero inspirar a la próxima generación de líderes en Puerto Rico a través de mi mentoría, excelente hospitalidad y gran servicio.”

Como parte de su responsabilidad social corporativa, Chick-fil-A La Rambla reconocerá la labor de 100 héroes de las entidades SER de Puerto Rico y San Cristóbal Cancer Institute, quienes recibirán comida del menú de Chick-fil-A gratis durante un año.

Las seis localidades ofrecen un plato de desayuno exclusivo del menú para Puerto Rico. El plato consiste en huevos revueltos, un panecillo, “hash browns” y la elección del cliente entre tiritas de pechuga de pollo, tocineta o salchicha. Además, todos sirven café 100% cultivado y tostado en Puerto Rico. Los empleados están adiestrados para preparar a mano, al estilo barista, cuatro opciones de la bebida: café con leche, cortado, americano y espresso.

Chick-fil-A, fundada por S. Truett Cathy en 1967, cuenta hoy con más de 3,000 restaurantes en Estados Unidos, Canadá y Puerto Rico, siendo la tercera cadena de restaurantes de servicio rápido más grande en la nación. Sus ventas anuales superan los $16,600 millones, solo superadas por McDonald’s y Starbucks.

La franquicia planea abrir entre 15 y 20 restaurantes adicionales en Puerto Rico para el año 2030, y espera también tener presencia en Europa y Asia.

El restaurante operará de 6:30 a.m. a 10:00 p.m. de lunes a jueves, y de 6:30 a.m. a 11:00 p.m. viernes y sábado. Los domingos, la franquicia permanece cerrada.

Fuentes: El Nuevo Día / News Is My Business