China contempla invertir alrededor de 6 billones de yuanes (aproximadamente $845 millones) en el desarrollo de tecnología de baterías de nueva generación para vehículos eléctricos (EVs). Esta iniciativa surge en un contexto donde la política industrial del país ha generado preocupaciones sobre la sobrecapacidad y se ha convertido en un punto de conflicto con Estados Unidos y Europa.

Según informó el periódico oficial China Daily, citando fuentes industriales no identificadas, seis empresas, entre ellas CATL, el mayor fabricante de baterías del mundo, y grandes automotrices como BYD y Geely, recibirán apoyo del gobierno para desarrollar baterías de estado sólido (ASSBs).

Este ambicioso proyecto, descrito como “sin precedentes,” estará dirigido por varios ministerios y comisiones gubernamentales, aunque los detalles específicos no han sido revelados.

Las baterías ASSBs representan una mejora sobre las baterías tradicionales de iones de litio (LIBs) al utilizar un electrolito sólido en lugar de líquido o gel. Estas baterías son más seguras, con menos riesgo de incendiarse o explotar, y tienen una mayor densidad de energía. Sin embargo, su disponibilidad es limitada debido a los altos costos y las dificultades de producción en masa.

El anuncio llega en una etapa complicada para sus relaciones comerciales con Occidente. A principios de este mes, la administración Biden impuso nuevos aranceles significativos a los EVs y baterías avanzadas chinas. Los funcionarios estadounidenses argumentan que es necesario proteger los empleos y negocios de EE. UU. frente a la sobreproducción en China.

La Comisión Europea también está considerando imponer aranceles a los EVs chinos, una decisión que se espera para el próximo mes y que podría afectar a los fabricantes chinos que exportan una gran cantidad de vehículos a Europa cada año.

A pesar de estas tensiones, China continúa impulsando la producción de EVs como parte de sus esfuerzos para mitigar la desaceleración económica inducida por el sector inmobiliario y promover una economía baja en carbono.

Fuente: CNN