Son varias las ciudades en Estados Unidos que han presentado públicamente sus planes para atender las protestas que pueden generarse desde mañana, martes, por el resultado de las elecciones.

Nueva York, Chicago, Los Ángeles y otras municipalidades ya comenzaron a explicar sus protocolos policíacos para la noche de las elecciones. Algunos comercios ya colocaron paneles de madera o tormenteras para evitar daños y saqueos, por las experiencias recientes en diversas protestas contra el racismo y la violencia policial.

En el caso de Chicago, aunque el enfoque principal es mañana, el día de las elecciones, el plan cubre 10 días y podría implicar el cierre de carreteras y levantamiento de puentes para impedir acceso al centro de la ciudad conocido como “The Loop”.

La alcaldesa Lori Lightfoot pidió este fin de semana que los electores “canalicen sus emociones” en formas creativas de protestas que no sean violentas y culminen en saqueos y daños a propiedad pública y privada. En la ciudad se han arrestado sobre 200 manifestantes por su esto en pasadas protestas.

En Nueva York, el Departamento de la Policía pidió a los comerciantes que se preparen y aseguren sus propiedades, así como guardar cualquier tipo de mueble y zafacones que estén fuera de sus negocios.

Lo mismo han preparado en Los Ángeles, Washington D.C. y otras que han hasta activado la Guardia Nacional, establecido toques de queda o adquirido equipos como gas pimienta.

Los resultados de las elecciones podrían conocerse desde las 7:00 de la noche, hora del este de Estados Unidos, pero algunos estiman que podrían no ser finales y extenderse hasta el día siguiente o más tarde.