El Departamento de Salud relegó a un segundo plano la realización de pruebas sobre COVID 19 en los centros de adultos mayores en la isla para priorizar en la administración de vacunas pero está lejos de lograr sus metas porque existe aún un 40 por ciento de adultos no inoculados.

Así lo confirmó la Procuradora de la Vejez Carmen Delia Sánchez al denunciar como “un grave error” del gobierno estatal haber relegado la práctica de realizar pruebas contra el COVID en los hogares de adultos mayores.

“Lo que hicieron fue pasar las pruebas a un segundo plano y darle prioridad a las vacunas pero no han logrado la meta de vacunar a todos los que hay que vacunar porque hay mucho desconocimiento respecto a las vacunas e incluso hay muchos empleados de estos centros que no están vacunados”, dijo

Sánchez razonó que muchos de los argumentos contra la vacunación son absurdos, pero también advirtió que hay muchos envejecientes que no se han vacunado porque no han tenido la oportunidad de hacerlo.

“Hemos establecido un centro para coordinar una vacunación acudiendo a la comunidad de las personas mayores”, dijo Sánchez al compartir la preocupación de expertos en gerontología.

La ex procuradora de pacientes de edad avanzada Roxana López dijo al Floro de Puerto Rico que un número significativo de personas adultas no se ha vacunado porque no tienen acceso y viven en condiciones de pobreza.