La derrota de Sara Palin durante las elecciones especiales de Alaska para el único escaño a la Cámara de Representantes federal aparenta indicar problemas para los republicanos en las elecciones de medio término que se aproximan. 

Palin, perdió frente a su principal contrincante, la demócrata Mary Peltola en un intento fracasado de un regreso político en el estado en que alguna vez fue gobernadora.

Aunque el ambiente político de Alaska es único, la contienda evidencia lo que ya es un patrón de elecciones a favor de los demócratas y en contra de los republicanos. El cambio en tendencias ocurre tras la decisión del Tribunal Supremo de los Estados Unidos de invalidar la decisión Rode vs Wade que legalizaba el aborto en todo el país. 

Desde la decisión de la Corte Suprema de poner fin a las protecciones del aborto, los conservadores han acumulado una serie de pérdidas asombrosas. Hace cuatro semanas, en el Kansas, un estado republicano, los votantes rechazaron abrumadoramente una enmienda que decía que no existía el derecho constitucional al aborto en el estado. En Nueva York la semana pasada, el candidato demócrata ganó una elección especial de la Cámara en lo que se consideraba un distrito líder. 

Ahora, la derrota de Palin a un escaño que los republicanos habían retenido por 50 años, evidencia un choque entre las propias posturas conservadoras de ultraderecha y de centro. 

Mientras que la candidata demócrada de Alaska basaba su campaña en posiciones a favor de las protecciones del derecho al aborto, Palin recibía ataques de contrincantes de su propio partido por abandonar abruptamente la gobernación del estado en 2008.

La derrota de la exgobernadora de Alaska y excandidata a la vicepresidencia republicana junto a John MCcain, aumenta la preocupación de los republicanos  divididos entre los candidatos de centro del partido que se alejan de Trump y los endosados por él.

Palin tendrá una segunda oportunidad a la candidatura de representante por Alaska en noviembre cuando nuevamente se enfrente a Peltola en las elecciones de medio término por un escaño de dos años que comienza en enero.