Esperan comience hoy a normalizarse la disponibilidad de diésel
Activan a la Guardia Nacional para que ayuden en el operativo
La falta de energía en una de las principales plantas de almacenamiento de diésel en Puerto Rico, Buckeye en Yabucoa, parece ser la causa principal para la crisis de combustible que vive el país a cinco días del pasó del huracán Fiona.
Como si no se hubiese aprendido nada sobre el manejo de este tipo de emergencias tras el devastador huracán María, la empresa LUMA tardó hasta el jueves en la noche en energizar la planta que permitirá la repartición de combustible alrededor del país.
Manuel Reyes, director ejecutivo de MIDA había alertado el jueves sobre el posible cierre de supermercados ante la imposibilidad de reabastecer los generadores eléctricos con el que operan los establecimientos por la falta de energía eléctrica.
“A principios de semana alertamos al gobierno de la situación y nos dijeron que estaba por resolverse en 24 a 48 horas, pasó ese tiempo y no veíamos solución, por eso cuando la prensa nos preguntó no podíamos decir otra cosa. El DACO siempre nos dijo que estaban los abastos pero el problema era de distribución porque Yabucoa no tenía luz para poder proveer suplir el combustible”, dijo Reyes en entrevista con El Foro de Puerto Rico.
Y es que como sucede con la mayoría de los asuntos importantes del país, hasta que no hace crisis, el gobierno no parece darle prioridad a los temas.
Hoy, el secretario de Estado, Omar Marrero, anunció en conferencia de prensa que una vez energizada la planta de Yabucoa, y con el arribo a mediodía de una barcaza con 300 barriles de diésel, se comenzaría a distribuir el combustible a las distintas gasolineras. Además, anunció la activación de la Guardia Nacional para que con sus camiones lleve combustible a aquellos establecimientos con necesidades críticas como hospitales, plantas de filtración y bombeo de agua potable, municipios y supermercados.
El ayudante general de la Guardia Nacional, José Reyes informó que tienen planificadas “16 misiones” para distribuir diésel a lugares con necesidades críticas alrededor de la isla. También han recabado la ayuda de las compañías Puma Energy y American Petroleum para que ayuden con la distribución.
“La realidad es que Luma no energizó Yabucoa, no le dio priordad. Creo que después que pase la emergencia tenemos que sentarnos y pasar revista de las lecciones aprendidas. En esta situación todos nos confiamos de que se estaba atendiendo”, dijo el líder del sector de alimentos.
Reyes aseguró que el sector privado se preparó para la temporada de huracanes “pero nadie anticipó que ibamos a estar tanto tiempo sin luz”. Sin embargo, la realidad es que en el último año la falta de energía eléctrica ha sido la orden del día y si algo tenía claro el país era que si la tormenta nos afectaba, pasarían días antes de LUMA pudiera restablecer el servicio.
“Cuando pasó la tormenta no vimos tanta devastación de postes como cuando el huracán María, por eso confiamos”, agregó.
No obstante, el secretario de Estado destacó en la conferencia de prensa que LUMA ha hecho tan buen trabajo que el mismo fue reconocido por la jefa de FEMA, Deanne Criswell, ante el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden en la reunión de ayer.
“Ella (Criswell) reconoció, más el Federal Coordinator Officer para la respuesta en Puerto Rico, Tomás Fargioni, ambos reconocieron que el trabajo que está haciendo LUMA es un trabajo de calidad de conformidad con las mejores prácticas, siguiendo protocolos de los mejores que hay en la industria, probados, siguiendo procesos… que comienzan a priorizar en lo que son las cargas críticas”, sentenció Marrero.
Reyes explicó que si en efecto hoy comienza la distribución de combustible podría tardar uno o dos días en lo que se normaliza el suplido a todos los comercios de la isla, y eso podría provocar que aquellos negocios que tienen poco diésel para mantenerse abiertos, tendrán que cerrar en lo que logran reabastecerse.