Los últimos debates por la presidencia de Estados Unidos, entre el Presidente Donald Trump, candidato republicano, y Joe Biden, candidato demócrata, se ven en riesgo de no suceder. Ambos equipos de campaña sometieron propuestas para poder llevar a cabo los últimos encuentros entre los candidatos, los cuales fueron pospuestos tras el presidente haber contraído el COVID-19. Aún así, los equipos no coincidieron en las propuestas.

Por parte de la Comisión de debates presidenciales, se propuso que el próximo debate del 15 de octubre se hiciera de forma virtual, esto fue motivado por la reciente noticia sobre la salud del presidente Trump. Aunque, Trump sostuvo que no participará en el debate presidencial si no es presencial, por lo que la campaña de Biden sugirió que el evento se moviera al 22 de octubre, fecha en la cual estaba estipulado el tercer y último debate. Trump estuvo de acuerdo con el cambio de fecha, pero solo si el debate es presencial, y propuso un debate adicional para el 29 de octubre, solo días antes de la elección general. El equipo de campaña de Biden, se negó a tener un debate tan cercano a la fecha de la elección general.

La comisión de debates, la cual tiene el deber de establecer acuerdos entre ambos equipos de campaña no ha opinado ni tomado acciones referentes a las propuestas recientes. Dicha organización ha estado bajo escrutinio luego del primer debate presidencial, donde hubo un deterioro y violación del formato establecido, mayormente por parte del presidente.

Tras la incertidumbre rodeando los debates, Biden se aseguró de tener un lugar frente a una audiencia nacional, en vez de tener el debate contra Trump el próximo jueves, como estaba estipulado, será parte de una transmisión de “ABC News”. El candidato demócrata, mientras hacía campaña en el estado de Arizona, también señaló su intención de asistir al debate del próximo 22 de octubre, sin importar los planes del presidente.

En una entrevista con “Fox Business”, Trump expresó que se sentía muy bien y llamó la idea del debate virtual un “chiste”. Su presidente de campaña, Bill Stepien, señaló que el Presidente Trump tendrá un evento de campaña este próximo jueves, en vez de asistir al debate de forma virtual.

Con menos de un mes para las elecciones, otro debate podría ser una gran oportunidad importante para Trump de adquirir votos para así rebasar a Biden en las encuestas y finalmente, las elecciones. La participación de Trump en otro debate también podría implicar otra pérdida de votos, como sucedió en el primer debate cuando no denunció públicamente a grupos supremacistas. En caso de que el presidente decidiera no participar en el próximo debate, no sería la primera vez, en su campaña de primarias de 2016, boicoteo un debate republicano para recaudar fondos para los veteranos.

Al salir del hospital el lunes, Trump aún presentaba síntomas, por lo cual el futuro de su campaña es incierto. Al igual que la campaña de Trump, el futuro de los debates también es incierto y dados los desacuerdos entre los equipos de campaña, junto con la salud del presidente, queda en cuestión si será posible a los candidatos debatir una vez más antes de las elecciones generales.