Italia enfrenta dificultades en instituciones hospitalarias por el COVID-19
El Dr. Luca Cabrini, tenia certeza que su hospital, ubicado en el centro del distrito de Lombardy, alcanzaría cifras de hasta 300 pacientes hospitalizados por el COVID-19. Actualmente, el hospital alcanzó la cifra de 500 pacientes por COVID-19.
Luego de los repuntes catastróficos durante la primavera del 2020 en Italia, los cuales abarrotaron los hospitales hasta su máxima capacidad y resultaron en un sinnúmero de fatalidades, el país vuelve a aumentar su cifra de posibilidad ante el coronavirus. De hecho, las personas confirmadas como positivas ante el COVID-19, sobrepasan el millón.
“Estamos muy cerca de no seguir el ritmo. No puedo decir cuando alcanzaremos el límite, pero ese día no está lejos“, dijo Cabrini, quien está a cargo de la sala de cuidados intensivos del hospital Circolo de Varese, el más grande de la provincia de 1 millón de personas al noreste de Milán, según Associated Press.
Durante el repunte de la primavera, el hospital se vio obligado a aumentar el número de camas en determinadas áreas, específicamente, de 20 a 45. El fin de semana pasado, el hospital contaba con 38 pacientes, por lo que han buscado expandir en otros espacios del hospital, para evitar una crisis como la de los pasados meses. La situación ha resultado difícil para el médico personal, pero no es por los pacientes que requieren de cuidado crítico, sino que se trata de las personas menos graves, las cuales son jóvenes usualmente, y requieren de cuidado por períodos de tiempo más largo. Por lo tanto, la Federación de doctores italianos estableció una cuarentena nacional, para así evitar enfrentar una crisis como la de la pasada primavera. Aún así, la ciudadanía no ha resultado tan simpatizante como en la cuarentena anterior. Hasta el miércoles, el 52% de las camas de los hospitales de Italia estaban ocupados por pacientes con coronavirus, por encima del umbral de advertencia del 40% establecido por el Ministerio de Salud. Nueve de las 21 regiones y provincias autónomas de Italia ya se encuentran de forma segura en la zona de alerta roja, por encima del 50% de ocupación del virus, con Lombardía en 75%, Piamonte en 92% y Tirol del Sur en un asombroso 99%. El gobierno italiano, ha estado reorganizándose, con el motivo principal de ofrecer cuidado cotidiano, como servicios de pediátricos y geriátricos, pero en las regiones y provincias con mayor cantidad de casos, se ha tenido que mantener cerradas las oficinas médicas dirigidas hacia la práctica rutinaria.
“Debemos seguir ofreciendo al menos un mínimo de servicios a todas las demás patologías”, dijo Cabrini. “Si cerramos nuestra sala de emergencias, significa que una población de 1 millón de personas se quedará sin atención de urgencia. No podemos permitir que eso suceda“. Los médicos italianos han señalado que durante el transcurso del verano, se debió gestionar ciertas medidas para evitar la ola de contagios que se ha presentado en tiempos recientes. En adición, se ha empeorado la situación, ya que no se pudo contener el COVID-19 en el área norte del país, y ya se adentró en el sur.