Según un informe realizado por la Organización de las Naciones Unidas para la educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés), en conjunto con el Instituto Internacional para la Educación Superior en América Latina y el Caribe (IESALC, por sus siglas en inglés) se menciona que aún los logros obtenidos por mujeres en el ámbito académico alrededor del mundo no les provee ventaja en comparación a los hombres cuando se trata de puestos de liderazgo. Debido a que la desigualdad sigue muy marcada cuando se trata de remuneración salarial, desempeño en las áreas de investigación, y en cuanto a publicación de artículos. Estos indican que la cantidad de mujeres en cuanto a la educación superior supera a la cantidad de hombres que se preparan académicamente, sin embargo, sus ingresos son inferiores significativamente en comparación a los salarios de los hombres en unos 28 países. Más adelante expresan que se ha podido ver un efecto notable en cuanto a la brecha de género cuando se trata investigaciones y de realizar publicaciones como consecuencia de la pandemia del COVID-19, ya que un estudio indicó que un 62% de los hombres publicó más artículos que las mujeres, quienes obtuvieron un 38%.

Por otro lado, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF, por sus siglas en inglés), lanzó un plan de acción para tratar la igualdad de género para los años 2018-2021, con la intención de promover los derechos de los niños y las niñas como iguales, y para que como hombres y mujeres tengan los mismos derechos, recursos, oportunidades, y protección.

Estos entienden que hay varias esferas de gran importancia de tratar a nivel mundial, entre ellas: ponerle fin al matrimonio infantil, la enseñanza secundaria de las niñas, la salud de los adolescentes con una perspectiva de género, salud e higiene menstrual, y finalmente, prevenir la violencia de género. Aún en tiempos modernizados, como los actuales, tenemos situaciones como estas donde las niñas están expuestas a muchos riesgos que impiden diferentes oportunidades en su vida, desde ser niñas hasta privarles de desarrollar competencias.

Por otra parte, la perspectiva de género supone sea la herramienta que les ayude a reconocer que deben tener una buena nutrición, maneras de como prevenir embarazos, y por su parte, enfermedades de transmisión sexual como el VIH, o el Virus del Papiloma Humano (VPH), el cual sigue en aumento en Puerto Rico. Viéndole a esta herramienta como un camino a prevenir la violencia de género, y enfrentar la crisis humanitaria que esto representa.

Sin embargo, en Puerto Rico enfrentamos todavía una situación crítica, cuando senadores como Joanne Rodríguez Veve por el Proyecto Dignidad (PD), quién mencionó en un video en vivo en su página de Facebook en el 2019, no apoyar la educación con perspectiva de género con el argumento de que esto afectaba a la familia heterosexual como institución. Cuando no hay base científica ni estudios que indiquen tal argumento. Pero si tenemos esta realidad la cual debemos combatir, la cual es que en Puerto Rico murieron para el año 2020, 60 mujeres por feminicidios y violencia de género.