La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que las altas temperaturas, las sequías y otros efectos del cambio climático tienen “graves repercusiones” en la salud mental y física de las mujeres embarazadas, los niños y la población de edad avanzada. La experta de la OMS en Salud Materna, Recién Nacidos, Niños, Adolescentes y Mayores, Anayda Portela, destacó en una rueda de prensa en Ginebra que estos grupos están “especialmente expuestos” a estos efectos y pidió una mayor inversión para proteger a estas poblaciones vulnerables.

Recientes estudios de la agencia sanitaria de la ONU revelan alarmantes datos sobre el impacto de las altas temperaturas y la contaminación atmosférica en las embarazadas, incluyendo un mayor riesgo de parto prematuro y efectos negativos en el desarrollo cerebral y pulmonar del feto. Además, las temperaturas inusualmente altas se asocian con la hipertensión y la diabetes gestacional durante el embarazo.

En cuanto a la población infantil, la OMS advirtió que cada grado centígrado adicional por encima de los 23.9°C (75°F) en la temperatura mínima diaria aumenta el riesgo de mortalidad infantil hasta en un 22.4%. La población de edad avanzada también se ve gravemente afectada por el calor extremo, con un aumento en la probabilidad de infartos y problemas respiratorios durante las olas de calor.

Otros efectos del cambio climático, como la sequía en Somalia y las inundaciones en Pakistán y Brasil, reducen el acceso al agua potable y al suministro de alimentos, provocando un aumento de las enfermedades diarreicas y la malnutrición en los colectivos más vulnerables.

Ante esta situación, Portela instó a los gobiernos a promover medidas específicas que protejan la salud en las distintas etapas de la vida y a garantizar que los servicios sanitarios estén preparados para atender las necesidades de las personas más expuestas a los desastres climáticos.

Fuente: Primera Hora