El Departamento de Educación de Puerto Rico necesita mejorar su planificación estratégica a nivel central, regiones educativas y escuelas para poder impactar el aprovechamiento académico de todos los estudiantes.  Este es un proceso de planificación sistemática y cíclica que refina la visión (dirección) y la misión (propósito) de una comunidad escolar que utiliza los datos recopilados en una evaluación de necesidades para establecer metas, objetivos y estrategias.  Es imprescindible que la evaluación de necesidades incluya un análisis de FODA que evalúa factores internos y externos de la comunidad escolar como: Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas, y un análisis PEST que analiza factores externos, concretamente los Políticos, Económicos, Sociales y Tecnológicos.  Esta planificación estratégica es una herramienta poderosa para atender la brecha académica y los aspectos socioemocionales a corto y a largo plazo de todos los estudiantes.  La planificación estratégica es, como dice el refrán, trabajar de manera más inteligente y no más difícil.   

Es imperativo que los líderes educativos ejerzan un liderazgo estratégico para crear e implementar un plan estratégico efectivamente.  Más importante aún, es que el líder educativo posea el conocimiento y las destrezas necesarias para crear, involucrar y motivar a toda su comunidad escolar en este proceso.  El plan estratégico incluye un plan de acción con metas, objetivos y estrategias que los maestros van a implementar en el salón de clases con fidelidad.  Por ende, este plan es un documento vivo, en otras palabras, es cambiante y se revisa y monitorea constantemente.  La evaluación de las estrategias son el puente entre el proceso de enseñanza y aprendizaje.  El “assessment” dentro del salón de clase es clave en alcanzar los objetivos del plan.

Muchos teóricos comparan el proceso de planificación estratégica con la planificación de un viaje utilizando un sistema de posicionamiento global (GPS). Especialmente cuando se viaja en un territorio desconocido y es necesario tener direcciones específicas y pasos explícitos para llegar al destino adecuado. El plan estratégico ofrece una dirección clara con un propósito específico y objetivos medibles y alcanzables para atender las necesidades específicas de los estudiantes más marginados.   

El Departamento de Educación utiliza el Diseño de Excelencia Escolar (DEE) como proceso de planificación estratégica.  El departamento debe fortalecer este proceso para verdaderamente impactar la educación de todos los estudiantes en Puerto Rico.  La planeación estratégica debe incluir una visión y misión del departamento que empodere a todos los miembros de la comunidad escolar. Las escuelas utilizan esta visión y misión para crear un plan que atienda las metas establecidas con la creación de objetivos específicos, medibles, alcanzables, realistas y marcados en un tiempo específico que permitan la implementación de las estrategias basadas en evidencias.     

En conclusión, la planificación estratégica es un proceso que permite a todos los miembros de la comunidad escolar y otras partes interesadas (stakeholders) de una escuela a ser proactivos en vez de reactivos en la formulación de su futuro.  Los “stakeholders” deben ser políticos, instituciones de educación superior, negocios y organizaciones comunitarias.  El departamento tiene la responsabilidad de descentralizar este proceso de planeación estratégica y no automatizarlo para hacerlo genérico.  Este proceso no solo debe de existir para el rendimiento de cuentas que exige la Ley Cada Estudiante Triunfa (ESSA), sino para verdaderamente innovar y lograr cambios significativos en la vida de todos los estudiantes del archipiélago de Puerto Rico.