Llamado de Putin para intensificar “operación especial” en Ucrania provoca protestas, caos y violencia en el país
A solo días de que el presidente ruso, Vladimir Putin emitiera un anuncio sobre la posible movilización de unos 300 mil reservistas para luchar en la «operación militar especial» en Ucrania, el país se ha sumido en una vorágine de incertidumbre. Largas filas de automóviles se aglomeran en los cruces fronterizos con los países a los cuales los rusos aún pueden huir como Georgia, Kazajistán y Mongolia. Un cuadro similar se repite en los aeropuertos donde los pasajes se han disparado a más de 2 mil dólares tras el anuncio.
Manifestaciones que no se habían visto, ahora se reportan no solo en Moscú y San Petersburgo, sino ahora también en pequeñas provincias como la de Yakutia y en la región sureña de Daguestán, donde varias mujeres persiguieron a un oficial de policía y gritando: “¡No a la guerra!”
Asimismo, otro caso se reportó en donde un hombre armado disparó a un comandante militar de reclutamiento en una oficina de alistamiento y luego dijo: “Todos nos iremos a casa ahora”.
El pánico por el llamado militar y el miedo a que el gobierno decida cerrar las fronteras a los hombres en edad para luchar ha provocado el ataponamiento de las fronteras del país.
“Los avisos de convocatoria se están entregando a todos. Nadie sabe quién recibirá uno mañana y, por lo tanto, decidimos con amigos por el momento descansar en un hermoso país”, dijo Roman Isif, un ruso que cruzó a Larsi, Georgia, en una entrevista con The Associated Press.
“Pánico. Toda la gente que conozco está en pánico, dijo David, un ruso que solo dio su nombre sin apellidos por miedo a represalias, durante una entrevista con la agencia de noticias The Associated Press durante un cruce fronterizo con Georgia. “Estamos huyendo del régimen que mata a la gente”, expresó el individuo.
Por su parte, medios rusos, informaron el lunes que los guardias fronterizos comenzaron a rechazar a los hombres en la frontera debido a la ley de movilización del Kremlin.
Mientras tanto, los medios de comunicación del país intentan pintar un panorama positivo mostrando imágenes de hombres ansiosos de alistarse en el ejército aún cuando la realidad en casi todo el país apunta a una recepción mucho menos positiva.