Los retos de la familia durante el “homeschooling” obligado en Puerto Rico
El archipiélago de Puerto Rico está pasando por una situación muy difícil a causa del COVID-19. Esta situación ha impactado grandemente la educación de los estudiantes en Puerto Rico. Por su parte, el Departamento de Educación de PR (DE) ha creado un gran abismo para los estudiantes y sus padres. El DE ha creado un gran vacío en la educación porque no está proveyendo una educación de calidad y tampoco está ofreciendo los servicios relacionados a miles de estudiantes de educación especial en los 78 municipios.
Los estudiantes de la isla han pasado por una serie de traumas causados por los huracanes y terremotos que han afectado su salud mental y socioemocional. Algo muy difícil es que los estudiantes tienen que ver a sus padres en un nuevo rol como sus educadores y esto puede traer muchos conflictos. Es una realidad que muchos padres o madres no tienen las destrezas ni las herramientas necesarias para asumir este nuevo rol con éxito y sin descuidar su rol de padre y madre.
Las consecuencias son devastadoras porque el estudiante no está recibiendo el apoyo adecuado para tener éxito en el proceso de enseñanza-aprendizaje. El proceso de enseñanza-aprendizaje está compuesto por el maestro, el estudiante, el contenido y las características de su entorno que debe de ser su salón de clase. Tristemente la brecha académica de los estudiantes sigue en aumento. Es muy probable que los estudiantes que pasen de grado estén deficientes de las destrezas académicas que necesitan y lo triste es que este rezago puede incidir en el aumento de futuros desertores escolares.
El impacto emocional y económico causado por esta pandemia ha impactado a los padres inmensamente. La gran mayoría de los padres están agobiados con la situación del DE. El DE debe reconocer que la mayoría de los padres no cuentan con los recursos económicos necesarios para pagar un servicio de internet banda ancha. Además, muchos de los padres no cuentan con el equipo tecnológico adecuado para que los estudiantes puedan recibir sus clases a través de la distancia. Incluso, el DE no ha considerado el impacto psicológico, económico y emocional que esta situación ha tenido con los padres y madres, ni adiestró a los padres más necesitados en como atender la educación a distancia de sus hijos.
El DE quiere empezar la educación presencial en marzo, pero aún no divulga su plan comprensivo. Tampoco habla del rol de los padres en este nuevo modelo de educación a distancia o híbrido. Este plan debe incluir como se va a tratar la salud mental y socioemocional de los estudiantes. También tiene que incluir como se va a facilitar la recuperación del aprendizaje de los estudiantes más vulnerables y desfavorecidos. Me alegro que ya empezaron con la inoculación de los maestros y otros profesionales de la educación, pero esto es solo un componente de un plan comprensivo. Los líderes del DE tiene que ejercer su liderazgo estratégico para crear un plan comprensivo que incluya metas alcanzables a corto y largo plazo.