El Dr. Rafael O. Toro-Serra, se desempeña como oncólogo quirúrgico de cabeza y cuello como parte del Centro de atención torácica Rod Taylor y el Centro de cáncer de cabeza y cuello en Orlando Health Cancer Institute.

A pesar de ejercer su carrera como médico en los Estados Unidos, el doctor puertorriqueño obtuvo su título de médico en la Escuela de Medicina de Ponce en Puerto Rico para luego completar su residencia en cirugía general en la Universidad de Buffalo en New York.  Fue nombrado Residente Gold Star del Año en Cirugía Pediátrica y completó su subespecialidad en cirugía oncológica de cabeza y cuello en el MD Anderson Cancer Center de la Universidad de Texas en Houston. 

Antes de unirse al Orlando Health Cancer Institute, el Dr. Toro- Serra, ejerció su especialización en cirugía endocrina de cabeza y cuello en el Norman Parathyroid Center, en Tampa, Florida. Además, contribuyó al capítulo sobre carcinoma de paratiroides en la segunda edición del libro médico publicado, “Surgery of Thyroid and Parathyroid Glands”. En adición, es miembro del Colegio Estadounidense de Cirujanos y de la Asociación Médica Estadounidense.

El oncólogo cirujano destacó que volver a Puerto Rico era complejo dado a los tediosos procesos a los que se tiene que enfrentar un médico para contar con su licencia. Aún así, intentó en cinco ocasiones regresar a la Isla y no fue posible. Cuenta con su licencia, pero decidió permanecer oficialmente en Florida. Lamenta la situación dentro del campo de la medicina en Puerto Rico donde cree que se carece de especialistas médicos y de un apoyo por parte de los planes médicos que honre el trabajo. Situaciones por las que considera que muchos de los profesionales en la medicina deciden ejercer su carrera en los Estados Unidos. 

El Dr. Rafael Toro-Serra confesó que permanecer en los Estados Unidos era lo más conveniente como profesional, pero esto constaba de sacrificar el ver a su familia y el estar fuera de su Isla. Sin embargo, comentó que el viajar de Florida a Puerto Rico era algo sencillo y bastante accesible.

De igual forma, sus sacrificios se ven recompensados en los logros que ha alcanzado como médico.

“La mayor satisfacción como profesional es ver el reconocimiento y la confianza de mis pacientes. Que muchos solo quieran atenderse conmigo, que me busquen y reconozcan mi labor, tengo pacientes que vienen desde Puerto Rico para atenderse conmigo. ¿Qué mayor logro que ese?”, mencionó.