El presidente electo de la Junta de Directores de la Asociación de Hoteles y Turismo de Puerto Rico, Joaquín Bolívar, lamentó las nuevas restricciones impuestas por la gobernadora Wanda Vázquez Garced en la nueva orden ejecutiva relacionada al COVID-19 y advirtió de las repercusiones que esto tendría sobre el turismo.

“Es una muy lamentable situación la que nuevamente le imponen a la actividad turística de la Isla, cuando es harto probado que hemos sido sumamente responsables con todos los protocolos establecidos por la Compañía de Turismo de Puerto Rico y que tienen la certificación de la Guía Operativa de Salud y Seguridad Turística, ya que las medidas de seguridad establecidas por nuestros socios son de primer orden, donde además de los protocolos necesarios, en muchos casos se exceden los requisitos mínimos, con el fin de tener una operación efectiva, salubre y apropiada para recibir todo tipo de público, mientras se protege la salud de todos los empleados. Nuestro mensaje ha sido claro desde el principio de esta emergencia, el negocio que no esté en cumplimiento se debe de multar y cerrar”, expresó Joaquín Bolívar en declaraciones escritas.

Sostuvo que restringir el uso de las playas tendrá un impacto adverso sobre los hoteles. De igual forma, advirtió que la limitación impuesta sobre la capacidad de los restaurantes puede la situación actual de la industria.

“Limitar el uso de las playas afecta grandemente uno de nuestros atractivos principales como destino turístico, lo que provocará nuevamente una baja en las reservas de hoteles. Mientras que limitar a un 30 por ciento a los restaurantes agravará nuevamente la situación económica de muchos de éstos, algunos se verán obligados a cerrar y por lo tanto no hará viable la recontratación de muchos de los empleados desplazados”, sentenció.

Bolívar también argumentó que hay carencia de datos científicos para sustentar el que las actividades turísticas contribuyan al contagio de COVID-19.

“Entendemos que se están tomando las decisiones sin la base científica adecuada, ya que no se pueden atribuir focos de contagio a los componentes de la actividad turística, sin embargo, los datos siguen apuntando al contagio comunitario, a las reuniones familiares en residencias y alojamientos a corto plazo. Se tiene que reforzar la fiscalización en estos centros”, sostuvo.