Un mes después de enfrentar una solicitud para su destitución, el presidente peruano Martín Vizcarra enfrenta una nueva solicitud de destitución al mismo tiempo que se investiga por un supuesto escándalo de corrupción. 

La nueva solicitud fue presentada por 27 de los 130 congresistas que responden al parlamento unicameral. El futuro de esta nueva petición es incierto, ya que para ser debatido o considerado necesita conseguir 52 firmas. La destitución del mandatario solo sería posible si el parlamento consigue 87 votos. 

Al mismo tiempo, la fiscalía abrió una investigación en contra del mandatario por un posible caso de corrupción. Sé cree que el actual presidente de Perú recibió sobornos cuando este era gobernador regional, entre 2011 y 2014. 

De acuerdo a las leyes peruanas, un presidente no puede ser formalmente acusado mientras dispone de su mandato, por lo que los legisladores volvieron asumir posturas de destitución ante el mandatario. Corporativos de las principales constructoras locales del país acusan a Vizcarra de haber recibido cantidades exorbitantes de dinero por haber delegado funciones en un proyecto de irrigación y un hospital. 

Antes de su presidencia, el mandatario realizó una campaña de cero tolerancias a la corrupción. Al día de hoy, ha negado todas las acusaciones en su contra y recalcó que cuando su mandato culmine no escapará del país sudamericano.   

Vizcarra sobrevivió a un primer intento de destitución el pasado mes de septiembre por presuntamente contar con “incapacidad moral” para realizar sus funciones. Este es el único presidente en 40 años que ha gobernado sin bancada en el congreso pero que cuenta con el respaldo de la popularidad, la cual ronda en 57%. 

El presidente peruano asumió el poder luego de que en 2018 el presidente Pedro Pablo Kuczynski renunciara a su cargo. En abril de 2021 el pueblo peruano tiene la responsabilidad de elegir un nuevo mandatario, ya que en julio del mismo año Vizcarra entregará el poder.