¿Qué brinda el plan de Biden?
El presidente Joe Biden lanzó ayer un plan de $2 trillones para modernizar la infraestructura de los Estados Unidos (EE.UU.) y simultáneamente propuso una serie de aumentos y reformas contributivas aplicables a las empresas y corporaciones que estarán destinadas a subvencionar el costo de las mejoras de infraestructura durante un período de 15 años.
Puntos Claves:
• Moméntum del Plan: la presentación de este plan es el primer paso para un largo debate sobre lo que debe ser una nueva ley de estímulo para mejoras a la infraestructura de todo EE.UU. y a la vez las propuestas de como los aumentos de impuestos corporativos deben aumentarse y como para financiar este ambicioso plan. Debo señalar que como el presidente Biden decidió anunciar su plan públicamente mientras el Congreso está en receso de Semana Santa, lo que garantiza una atención masiva de los medios de comunicación acaparando así una atención nacional y mundial.
• Efecto en el Congreso: la Cámara de Representantes y el Senado federal han sentado algunas de las bases sobre los temas de infraestructura e impuestos corporativos mediante la celebración de vistas publicas en las últimas semanas. Este proceso y vistas públicas aumentará su visibilidad durante los meses de abril y mayo. Luego, se espera que líderes demócratas tanto de la Cámara como del Senado incluirán sus prioridades en el proyecto de ley.
• Proceso de votación: aunque aún es muy temprano para pensar en programación de votaciones sobre este plan del presidente, nuestra lectura es que la Cámara será quien liderará el proceso y se espera su aprobación antes de este verano. Según ha ya expresado el presidente Biden y algunos líderes demócratas de Cámara y el Senado, todos preferirían ver un proyecto convertido en ley para las postrimería de julio y antes del antes del receso de verano del Congreso, pero pensamos que esta proyección de tiempo es un tanto acelerado y muy fácilmente pudiese moverse para el último trimestre del 2021.
• Punto de partida del American Jobs Plan: la propuesta del presidente Biden será la base de discusión, dialogo y negociación para que el Congreso lo considere seriamente. Conociendo el proceso legislativo federal, tanto la Cámara como el Senado, incluirán medidas específicas que atiendan temas claves en sus jurisdicciones. El Congreso debatirá arduamente todos estos temas en los próximos meses, y saldrá para aprobación una propuesta final que será un reflejo de lo que los Congresistas entiendan mas crítico para sus constituyentes.
• Posible aprobación bipartidista: el deterioro de la infraestructura de los EE.UU. debe ser un tema bipartidista, de hecho, algunos aspectos de este plan son bipartidistas, pero vemos muchos que no lo son. Por ello, los líderes demócratas utilizarán el proceso de reconciliación presupuestaria para aprobar el proyecto de ley en la Cámara y el Senado. Sin embargo, el efecto más crítico de este proceder resultará en que el Senado pudiera aprobar la propuesta final con una mayoría simple o de 51 de votos en lugar de los 60 votos que se necesitan para aprobar la vasta mayoría de las leyes.
La sustancia del American Jobs Plan
• Inversión en infraestructura: la inversión de $2 trillones en infraestructura atraerán un claro apoyo bipartidista, pero pensamos que el enfoque en la energía renovable y su infraestructura relacionada no será del agrado del bloque republicano. Un claro ejemplo de esto, son los líderes del Senado que apoyan la industria del carbón como es el caso del senador demócrata Joe Manchin, siendo esta industria clave en su estado de Virginia. Como este ejemplo hay muchos que tendrán que hacerse para acomodar necesidades específicas de los constituyentes de los 50 estados y territorios no incorporados.
• Adición de proyectos por los congresistas: Los miembros de Cámara y el Senado intentarán incluir una plétora de proyectos de infraestructura favoritos al proyecto de ley para beneficiar a sus distritos o estados. Este tipo de acciones tiende a perjudicar tanto el progreso como la reputación del esfuerzo ante público a medida que los debates van evolucionando públicamente.
• Aumento a las tasas de impuestos corporativos: Las disposiciones de aumentos de tasas de impuestos descritas por el presidente Biden en el American Jobs Plan se impactarán positiva o negativamente, según la Cámara y el Senado vayan redactando sus propios proyectos de ley. El plan del presidente solo atiende los aumentos a las tasas de impuestos corporativos, pero estamos seguros de que en la Cámara y el Senado también se incluirán aumentos de impuestos y disposiciones relativas a los individuos acaudalados.
• Algunos de estos aumentos incluyen los siguientes:
o Aumento de las contribuciones sobre las ganancias de capital.
o Cambios a los impuestos sobre el Caudal.
o Aumento a la tasa contributiva a los de mayor ingresos al 39.6%.
Estos son algunos de los cambios que vemos que pueden suceder con las tasas contributivas, pero de igual modo, pensamos que en medio de una pandemia no se debe aumentar los impuestos, por un lado, estás ofreciendo estímulos de $1.9 trillones y dos semanas después propones aumentos en impuestos. Este pensamiento asimétrico puede tener un efecto adverso en la economía y puede descarrilar una buena parte del progreso que se ha logrado hasta ahora.
Como sucede usualmente, en el Congreso los proyectos de ley entran de una forma y salen de otra, y el American Jobs plan estará sujeto a debates importantísimos durante los próximos meses, con miras a que se incluyan una serie insospechada de enmiendas al plan propuesto por el presidente Biden. Por otro también esperamos que se amplíen las bases y tasas de las contribuciones corporativas. El Congreso no tiene muchos turnos al bate en el tema de reformas contributivas y las delegaciones demócratas de Cámara y Senado, en especial los más progresistas, pondrán una gran presión para que se incluyan disposiciones de política contributiva que sean de su autoría y agrado en el proyecto de ley final.
• Propuestas no incluidas en el Plan Biden:
o No incluye un aumento a los impuestos federales a la gasolina.
o Tampoco propone ninguna nueva “tarifa de usuario”, como lo seria un impuesto sobre las millas recorridas que han sugerido algunos legisladores.
o Tampoco menciona otras ideas que se hayan planteado para financiar infraestructura en el pasado, como sería la creación de un Banco de Infraestructura, o una mayor privatización de ciertos proyectos de infraestructura o el restablecimiento de los “Build America Bonds” conocidos como “BAB’s”, entre otras propuestas que pudieran surgir.
o Tampoco incluye mención alguna de impuestos preferenciales para empresas que se establezcan en los territorios americanos y la cual beneficiaría a Puerto Rico enormemente, le toca ahora a la comisionada residente Jennifer González hacer sus mejores estrategias para incluir provisiones de impuestos para atracción de manufactura para Puerto Rico.
En conclusión, notamos que el apoyo más fuerte hacía el American Jobs Plan vendrá principalmente de los demócratas y contará, como es de esperarse, con la oposición de los republicanos del Congreso.
Ahora bien, el grupo mas crucial para seguir es la comunidad empresarial, la cual apoyará, en términos generales, el plan para mejorar la infraestructura nacional, pero les molestará que el costo de este plan lo paguen ellos mediante un aumento en los impuestos corporativos. Si los líderes empresariales no se unen en repudiar los aumentos en tasas corporativas, esa división le puede dar el impulso a los líderes demócratas del Congreso para aprobar este proyecto de ley.
Para más información puede accesar el plan aquí: American-Jobs-Plan-Fact-Sheet.pdf.