Representantes se vendan los ojos para entender como se desenvuelve un no vidente
El presidente de la Comisión de Turismo y Bienestar Social de la Cámara de Representantes, Néstor Alonso Vega, conmemoró este pasado miércoles, 15 de octubre, el Día Internacional del Bastón Blanco, como símbolo del esfuerzo y tenacidad que realizan las personas no videntes para integrarse a la sociedad.
Como parte de las actividades, las cuales estuvieron enmarcadas en estrictas reglas de salud y seguridad, Alonso Vega estuvo acompañado de varios Representantes quienes se vendaron sus ojos por espacio de una hora para así conocer de primera mano cómo se interactúa sin utilizar el sentido de la visión.
Los legisladores hicieron tareas como caminar por los pasillos de la Casa de las Leyes, sentarse a merendar y hasta interactuar en el hemiciclo de la Cámara, entre otros.
“En esta ocasión decidimos hacer algo diferente, por eso invitamos a varios compañeros legisladores, incluyendo al amigo Jorge ‘Georgie’ Navarro Suárez, para que pasara varias horas del día vendado en sus ojos con el propósito de que conozcan cómo se trabaja, cómo se desenvuelve una persona no vidente en la Legislatura”, dijo Alonso Vega, en declaraciones escritas.
Según datos disponibles, desde la década de los años sesenta se celebra en los Estados Unidos el Día del Bastón Blanco.
“Agradezco al Presidente de la Cámara de Representantes, Carlos ‘Johnny’ Méndez, por siempre conmemorar este importante día en que se celebra la gran aportación que realiza la comunidad no-vidente en Puerto Rico. Hoy reconocemos la relevancia que tiene un objeto tan simple, pero indispensable. Este objeto, el bastón blanco, ayuda a las personas no videntes a moverse, identifica y permite que otras personas puedan ayudarles cuando lo necesiten”, añadió el Representante por Acumulación.
Alonso Vega quedó ciego a los 11 años, y fue electo representante por acumulación en las elecciones generales de 2016 con su lema: “no se necesita tener vista para conocer las necesidades del pueblo”.
De acuerdo a datos recientes del Negociado del Censo de los Estados Unidos, el 6.2 por ciento de la población en Puerto Rico tiene alguna dificultad de visión, cifra que representa un total de 214,243 personas con discapacidad visual severa o ceguera total.