Con el 86 por ciento de los votos contabilizados en las elecciones generales , los resultados en Israel apuntan a la victoria del bloque liderado por el ex primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. La alianza política que incluye varios partidos ultraortodoxos, ya suman 17 escaños: 10 de Shas, que representa a los haredíes sefardíes y mizrajíes, y 7 de Judaísmo Unido de la Torá, partido de los asquenazíes ultraortodoxos.

Uno de los líderes de la coalición son Itamar Ben-Gvir y Bezalel Smotrich, que han ganado notoriedad en el país por utilizar una retórica antiárabe y abogar por la deportación de políticos o civiles “desleales”. Por su parte, el político Ben-Gvir adquirió parte de su fama cuando fue filmado sacando un arma después de que los palestinos le lanzaran piedras mientras visitaba una zona predominantemente árabe en el este de Jerusalén ocupada y pedió a la policía que disparara a los culpables. Sin embargo, en declaraciones a los periodistas el miércoles, este prometió “trabajar por todo Israel, incluso por aquellos que me odian”.

Al momento, el movimiento político se apunta 65 escaños de 120 en total en el Parlamento Israelí que le proveerían una mayoría, y por ende, la victoria en los comicios.

Con el regreso del ex primer ministro Netanyahu de 73 años, se espera que las políticas antipalestinas se recrudezcan. El mandatario ha expresado su oposición a la creación de un Estado Palestino en Cisjordania y la Franja de Gaza como solución al conflicto palestino-israelí, fórmula apoyada por la mayor parte de la comunidad internacional, incluida la administración del presidente Joe Biden.

Estas serían las quintas elecciones en Israel en menos de cuatro años. La cantidad de elecciones en tan poco tiempo en el país se debe a que en Israel existen varios partidos políticos que no logran adquirir la mayoría parlamentaria para gobernar, por tanto se asocian. Sin embargo, en la mayoría de los casos, las alianzas duran muy poco y el gobierno se derrumba.

Con estas elecciones, el ex primer ministro de Israel regresa a su escaño como el primer ministro en mayor tiempo de servicio en el país.

Benjamin Netanyahu regresará al poder en medio de un juicio político por presunto soborno, fraude y abuso de confianza, cargos que él niega rotundamente. Sus posibles socios en un gobierno de coalición, han dicho que reformarían la ley, una medida que detendría el proceso en su contra.