Testimonio de sargento podría cambiar rumbo de investigación por muerte de joven a manos de la Policía
Fuentes de la Policía afirman que cuentan con el testimonio de un sargento que fue desobedecido por los agentes que dispararon a Javier Antonio Cordero Neváres. El sargento presuntamente se abstuvo de disparar y dio órdenes de que no abrieran fuego a los agentes recién graduados. Además, los fiscales cuentan con otro testigo, una agente adscrita al Negociado de Vehículos Hurtados de Carolina que no disparó e impidió que otra compañera de la uniformada lo hiciera.
Por su parte, la Policía, continúa a la espera de los exámenes de balística y otras gestiones periciales encomendadas al Instituto de Ciencias Forenses para continuar con la pesquisa.
El joven de 16 años murió a manos de la policía cuando la noche del uno de agosto robó una guagua de la urbanización Villa Fontana en Carolina. El robo fue notificado a las autoridades que seguían su marcha a través de un GPS provisto por el dueño del vehículo. Luego, los agentes del Negociado de Vehículos Hurtados de Carolina pidieron cooperación a sus compañeros uniformados del Precinto de Puerto Nuevo, para intentar detener al conductor de la guagua. Finalmente, en un intento por escapar de las autoridades, el joven se trepó sobre la acera y chocó un automóvil lo que provocó que los agentes le dispararan en más de 60 ocasiones. El joven murió en la escena tras recibir cerca de 15 impactos de bala. Al momento de los hechos, este no se encontraba armado.
Tras la muerte del joven, siete de los agentes y un sargento fueron desarmados y una de las patrullas fue ocupada por órdenes de la fiscal Betzaida Quiñones.