Hemos escuchado casi toda nuestra vida sobre la zona de confort. Es esta zona metafórica en la que todos nos encontramos. En ella nos sentimos seguros, protegidos y cómodos. Es espectacular tener esta sensación, es comparado a estar bajo las sábanas de la cama o tomar un rico café mientras lees las noticias del día. Ahora, ¿qué ocurre cuando esta comodidad nos hace daño?  Podemos ver en nuestra vida como no todo lo que nos causa tranquilidad es bueno. Por ejemplo, gritar en una discusión nos puede dejar tranquilidad en ese momento, sin embargo, laceramos nuestra relación.  

Pasar demasiado tiempo en una zona de confort reducida nos lleva a limitarnos de explorar un mundo lleno de posibilidades. En ocasiones salimos de ella para estudiar o viajar; esta es la zona de aprendizaje. Más allá de la zona de aprendizaje está la zona de miedos, donde todo es incierto y pensamos que seremos atacados por criaturas con tentáculos. Esta zona realmente es la zona mágica; la zona en que pueden ocurrir cosas maravillosas como, por ejemplo, una nueva relación, emprender en un nuevo negocio, fortalecer el área espiritual, obtener el cuerpo que deseo, o mudarte a un nuevo país.

Tomemos por ejemplo el lugar donde trabajas. ¿Cuántos años llevas ahí? ¿Ese trabajo o posición te hace feliz? ¿Has querido cambiar o aspirar a algo mejor y no te atreves? Te cuento que puedes estar en una zona de confort. Uno de los peores sentimientos es mirar hacia atrás y ver cómo el tiempo transcurrió y no te atreviste a hacer algo que soñabas. Tal vez sea momento de emprender en un negocio, solicitar una nueva posición en la organización en la cual trabajas o tal vez, cambiar de trabajo. Considera también si el realizar un cambio requerirá de una planificación, como puede ser estudiar, ahorrar, mudarte o cualquier otro detalle que sea importante. 

No gastes tiempo de tu vida donde no eres feliz. Si requieres un cambio, busca apoyo de alguien que haya cambiado o de un profesional. Muchos piensan que debemos eliminar la zona de confort cuando realmente lo que debemos es expandirla. Al expandirla podemos movernos libremente en comodidad y crecimiento.